HOTEL DE 66 ESTRELLAS? BUSQUENLO EN LA BOCA, NO EN TRIVAGO…

Griten,  alégrense, festejen hinchas de Boca. Somos campeones otra vez… Hemos sufrido este campeonato largo y bien vale la pena disfrutarlo y gozarlo desde ayer hasta el lunes próximo, como mínimo. La alegría se extiende a verle las cara a nuestros hijos saboreando un logro más, al percibir esos festejos hoteleros, impensados hace un par de semanas y hasta con sonrisas por ver algunos que recrearon el famoso fantasma de la B.. Y espantar en forma definitiva el otro fantasma que nos aquejaba, el de la V (La Volpe)…

Desacelerando el pulso, tratando de dejar el sentimiento un poco más lejos, y buscando, como todo periodista, razones imparciales que justifiquen por qué Boca es campeón, yo encuentro, al menos cuatro argumentos.

Uno, porque llegó a ser puntero en la fecha 13 y desde ahí no se bajó más de lo más alto. Es muy raro en un campeonato largo que un equipo llegue a la punta y no se baje más. Eso es habitual en otro tipo de torneos, donde hay mucho supermacía, como la Liga Italiana que obtiene la Juventus o la Española cuando Barcelona y Madrid sacan ventaja y ganan “de punta a punta”. Pero en un fútbol competitivo como el nuestro es un hecho poco visto. Boca realmente lo demostró y fue banca durante mucho tiempo, cuando sabemos que habitualmente nos gusta ser más Punto que Banca en los campeonatos y ganarlos “de atrás”. No se va a repetir esta cualidad en torneos futuros, ya lo verán.

Otro valor que rescato es  la capacidad goleadora del xeneize. Hicimos goles en 25 de los 28 partido que jugamos. Solo no convertimos vs Lanús en la primer fecha, vs Estudiantes y Rafaela (todos de visitante). Somos el equipo con más goles y con mejor diferencia de gol y, junto a Banfield, el que más ganó. Recuerdo esa seguidilla de tres partidos convirtiendo 4 goles (Racing – River – Colón) que dio la pauta que este equipo estaba para campéon, hacia fines del 2016. Si un equipo pretende el título, una capacidad goleadora lo ayudará  mucho. Y además, tenemos un 9 que puede ser el goleador del torneo, también es otro dato objetivo que habla a las claras de por qué somos campeones. Desde la época del glorioso Martín que no se da esta situación. Sin dudas, el jugador que nos costará retener en el próximo mercado de pases será Benedetto. Y luego el colombiano Barrios. Y ojo con Pavón. Y que Gago siga fresco y radiante como en las últimas fechas…

Un tercer  punto fundamental fue haber ganado casi todos los clásicos que jugó. Perdimos solamente con Ríver de locales, empatamos con Huracán y le ganamos con autoridad y presencia a San Lorenzo, Racing, Independiente, Ríver en su cancha y Vélez.

La cuarta razón es que cuando tuvo que ganar, en las difíciles, Boca ganó. Y, en contraposición, su archirrival que venía “comiéndose a los chicos crudos achicando distancias”, cuando tuvo que hacerlo, perdió. Boca tenía que ganarle a Newell´s luego de un superclásico que golpeó duro. Y lo hizo. No jugó bien, pero ganó cuando más  había que hacerlo. Volvió la presión frente al invicto Independiente y acá no solamente ganó, sino que lo hizo con autoridad, buen juego, carácter, continuidad, presencia, siendo un equipo compacto y solidario y con explosión ofensiva. Y lo mismo ocurrió vs Aldosivi, frente a un rival más débil, eso sí. En cambio Ríver no pudo ni con San Lorenzo ni con Racing cuando más lo necesitaba. Asumir la presión y sacar lo mejor de sí en esos momentos, habla de un equipo que está preparado para ser campeón. Y eso demostró Boca en este último tiempo, a pesar de no contar con jugadores de carácter como Schiavi, Serna, Riquelme, Palermo, Bermudez, Guillermo.  El DT logró transmitirle a sus dirigidos en estos partidos la necesidad de confiar en nuestras fuerzas, jugar el partido sin distracciones y con el convencimiento de que había que poner todo para ganarlos.

Le agradezco a Boca por esta alegría que nos vuelve a brindar. Felicito a los jugadores, al cuerpo técnico y a los dirigentes. Creo que ya nombré a quienes fueron, a mi entender, los mejores jugadores de nuestro equipo. Felicito a los Mellizos por darse cuenta  que había que cambiar para seguir punteros luego del superclásico, primero de esquema y luego de nombres. Para entender que necesitábamos un 5 que cubriera mejor los huecos e hiciera el retroceso y, además, liberar a Gago. Para cambiar a los defensores poniendo a los de menos nombre, pero con más sangre, concentración y conceptos claros: anticipo – rechazo sin arriesgar – cierres de laterales – auxilio solidario. Creo que es un muy buen plantel para ganar torneos locales.

Y ahora voy más allá. Ya saben cuál es nuestro nuevo objetivo, el próximo torneo local y la Copa Argentina serán anécdotas que podrán o no sumar una estrella más. Pero nosotros DEBEMOS IR por la Copa Libertadores. “Quiero la Libertadores” canta la 12 todos los domingos. Y ahí le hago un pedido a los dirigentes:  hay que comprar POCO pero  MUY BUENO. Jugadores con carácter, presencia y experiencia para jugar partidos internacionales. Sí o sí uno o dos zagueros que sean el/los Patrones de la defensa. Goltz me gusta. Si se va Benedetto, debemos traer un 9 con aquellas características. Si se va Pavón, traer un extremo con aquellas cualidades. Tal vez un arquero estilo Marchesín también sería ideal. Y que Barrios se quede para que su imagen y semejanza con Chicho sigan creciendo.

 

Disfrutemos este presente glorioso que tiene un sabor especial porque el rival principal fue Ríver y porque muchos “AntiBoca” ya estaban refregándose las manos pensando en que se nos iba de las mismas… Es hora de ir a festejar ante Olimpo pero sin Olímpica… Ese tradicional festejo lo guardamos para nuestra Bombonera, que volverá a estar más dulce que nunca para alegría de todo el pueblo boquense…

Acerca de

Periodista Deportivo recibido en el Círculo de Periodistas Deportivos en 1989. Socio vitalicio del Círculo de Periodistas Deportivos. Experiencia en radio, revistas y periódicos. Práctica de prensa en Copa América 1997. Conferencias Scaloni 2022/23 Cronista de los Premios Olimpia anualmente

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