QUE DESGRACIA, NOS PASEO CROACIA!

Más allá de la sentencia buscando la rima para sintetizar lo sucedido ayer, tengo un par más de opciones tales como “Fuimos Disneylandia en el planteo vs Islandia” o “Qué miseria no ganarle a Nigeria”. Como ven, títulos sobran lo que falta es EQUIPO. Una vez más ha quedado demostrado que la selección argentina post mundial 2014, la mayoría de los jugadores que vienen integrando sus sucesivos planteles no son capaces de superar la primera adversidad. Terminan siendo un equipo débil, sin reacción, sin vergüenza, sin respuestas, con flaquezas de toda índole: espirituales, físicas, psíquicas y futbolísticas. Un equipo vacío que jamás muestra actitud, sin rebeldía, sin cambio de ritmo, sin tomar riesgos ni afrontar el 1 contra 1 nunca. Un team fatalista, pesimista, depresivo… Y eso tal vez sea lo más doloroso para el hincha de fútbol. Ayer fue un golpazo. Si bien la razón lo anunciaba, el corazón se resistía. Se podía perder, pero dio vergüenza cómo se perdió. Tratando de ser más imparcial que nunca, es la crónica de una muerte anunciada, Un tobogán  que siempre tuvo la pendiente hacia abajo y ayer encontró el arenero en el tercer o cuarto subsuelo.

Convengamos en algo. No somos tan buenos como nos creemos. Como bien lo recuerda JPV hace más de diez años que los seleccionados juveniles no pelean títulos mundiales. La última conquista fue Canadá 2007. En su momento, se desmanteló un equipo de trabajo que había valorizado el semillero nacional de la mano de Pekerman, primero, y Tocalli después. No tenemos grandes volantes que estén entre los mejores del mundo. Los delanteros rompe redes lo hacen en sus equipos, pero en la selección tienen la pólvora mojada. Los laterales al estilo Dani Alves, Marcelo, Jordi Alba, son inalcanzables para nosotros, ni siquiera un Sergi Roberto. Son individualidades que funcionan  muy bien en sus equipos pero bastante mal con la celeste y blanca. Y esto le cabe también a Messi. En qué mundial Messi fue figura? Jugó cuatro… En los primeros partidos del 2014, hasta el partido con Suiza y nada más… Por qué ayer, aunque sea, al final no intentó agarrar la pelota y “hacer la heroica”? Por qué no rebelarse contra la situación e inventar una jugada de otro planeta como lo hemos visto hacerlo infinidad de veces en el Barcelona? Esta temporada de la Liga tuvo varios partidos que los empató o ganó él al final del encuentro “sacando el as de espadas que tiene en su pie izquierdo”. Por qué nunca lo vimos hacer eso con la camiseta argentina? Y particularmente ayer, todos nos sorprendimos cuando lo vimos preocupado rascándose la cabeza al momento de escucharse los himnos. Qué le pasaba? Qué le pasa? Problemas financieros, personales, familiares, futbolísticos – no le gustaban los 11 que salieron a la cancha? No sé, pero parecía que ya Antes del partido estaba vencido, apesadumbrado, derrotado. Y los 90 minutos no hicieron más que confirmarlo. Siempre cabizbajo, enojado, desmotivado. Es el capitán del equipo. El que tiene que arengar a todos en las buenas y en las malas, el que tiene que aparecer cuando nadie pega una, el que tiene que pelearla hasta el último minuto, el que debe pegar 4 gritos para que algún compañero reaccione, ese es MI capitán. Messi no da el perfil, para nada. Al menos en la Selección Argentina, y ayer terminó de confirmar la idea.

Mirando lo que fue el partido, Argentina salió a jugarlo con un esquema táctico 5-3-2, poniendo mucho énfasis en lo defensivo y resignando cómo elaborar juego ofensivo. El primer tiempo mostró cierta disciplina táctica y un funcionamiento endeble de la línea de 3, donde el tándem Mercado – Salvio dejaba huecos importantes, al tiempo que Mascherano trataba de organizarlos… y nada más. Llegamos un par de veces al arco contrario, pero con un Messi apagadísimo, confundido, callado y apesadumbrado. Y un kun Agüero que no la tocó los últimos 21 minutos del primer tiempo! De terror. Claramente eran dos bloques muy diferentes y desproporcionados: 9 defendiendo y 2 atacando. El empate era el objetivo y, si se podía, había que intentar llegar con peligro al arco contrario sin descuidarse. Pero todo sucumbió con el horror del gol de Croacia. Caballero dio más pases que Messi ayer!!! Es toda una síntesis. El arquero tiene que estar preparado para jugar alguna pelota con el pie, pero no es el líbero del equipo, por favor. Y tanto darle la pelotita, falló en una – y si falla el arquero es gol – y… fue gol, por supuesto. Y ahí vino el acabóse. Argentina “ se murió”, se desequilibró, se encegueció. De repente, nos llevamos de dudas y, para complicar aún más la situación, el Dt mandó señales totalmente incorrectas e inconexas. Mantuvo “el cambio de vóley” poniendo a un 9 (Higuaín) x otro 9 (Agüero), cuando había que empatar… Frená el cambio y buscá una variante, en el ingresado o en el reemplazado don Sampa!!!. Y al rato mandó a la parrilla, digo, a la cancha a Pavón – capricho del DT de no ponerlo de arranque – y a Dybala como dos manotazos de ahogado para que la confusión fuera total. Y aquí se comprobó, una vez más, la falta de planificación del DT ante la primera adversidad. No hubo variantes ya estudiadas luego del primer gol de Croacia, “…qué hacer si nos convierten…”, fueron simple corazonadas. Claramente se evidenció el excesivo de  pragmatismo y la no planificación. Y si quedaba alguna duda, acabo de enterarme lo que publicó en su libro (“país generoso, diría Rial) “Mis Latidos”: “…Yo no planifico nada. Todo surge en mi cabeza cuando tiene que surgir. Brota naturalmente en el momento oportuno. Odio la planificación. Si planifico, me pongo en el lugar de oficinista. Soy el de Alumni del 91. El fútbol no se estudia; se siente y se vive. Parto desde ahí. Yo soy de la calle…” No más comentarios, dirían mis abogadazos Horacio DLC. y Fernando M. Ratifica lo que siempre dije, juro que recién me enteré de este párrafo. A propósito, el se jacta de ser de la calle… allá va a terminar pronto y de patitas… (Nuggets x 10!!!!). Me parece que el DT debería ir buscando asilo en Sri Lanka, más allá de lo que pase con Nigeria, pasemos o no. Además de las falencias marcadas, este DT ha tenido y tendrá insólitas contradicciones permanentes, entre lo que pregona y lo que hace, entre lo que entrena y lo que juega, entre lo que plantea y lo que analiza. No ha hecho buena química con los jugadores. Resignó sus convicciones para “ganárselos” y no lo logró. Insinuó refundar la Selección Argentina y la terminó de fundir. Y como si esto fuera poco, ayer dio una lamentable imagen puteando a un jugador rival, pidiendo el VAR para sancionar a otro y se llevó de premio el insulto de miles de argentinos que estaban en el estadio, ilusionados con una actuación que nunca llegó.

El final infeliz, lamentablemente, estaba escrito. Frente a un equipo ordenado, prolijo, sensato, con juego claro y conectado, los goles prácticamente llegaron sin esfuerzo. En el último, vi varios argentinos levantando su brazo a varios metros de distancia pidiendo un offside inexistente, ese fue “su mayor esfuerzo”. Como dije hace 5 días, el fantasma del 2002 se hizo presente en mi memoria y ahora ya está atrás de la puerta, esperando para entrar. Acaba de ganar Nigeria y lo asustó un poquito al fantasma, pero igual está cerca, eh! Hay que ganarle a los africanos ahora!

Tratando de salir de la depresión mundialista, pienso en cuál sería la solución. Para mí, contratar un DT al estilo Cholo Simeone. El o alguno similar que fije las pautas de conducta, de entrenamiento, de prioridades, de fechas para que los jugadores elegidos estén al servicio de su selección. Que tenga libertad para elegir a quien quiera. Que les aclare a cada uno que pueden ser titulares o suplentes, pero tienen que trabajar todos por igual. Que no existe “el convocado que le hace bien al grupo”. Que los amigos son para las fiestas de cumpleaños o casamientos, pero no para jugar en la selección argentina. Que el equipo lo arma él. Que los exprima en los entrenamientos. Que les fije sus conceptos futbolísticos. Que tenga variantes, plan B y C. Que no se cierre a una única idea de juego. Que planifique y organice. Que logre que el todo sea más que la suma de las partes. Suena utópico, déjenme soñar… yo por un momento pensé que podíamos llegar a cuartos de final…

Una última reflexión. Todos quienes hemos visto jugar a Simeone en la selección argentina, podemos creernos que no quiso asumir post Sabella porque “no era aún su momento”? Quién más que el Cholo querría defender los colores argentinos ahora como DT?  El sabía que nunca podría manejar a esta generación de estrellas, que se devoraron a Basile, Batista, Maradona, Martino, Bauza y Sampaoli, y  que negociaron con Sabella después de Bosnia en el Mundial 2014. Entonces elegantemente dijo que no. Ojalá que si es el elegido ahora diga que sí.

Marce Mort (enviado especial que NO está en Rusia)

Acerca de

Periodista Deportivo recibido en el Círculo de Periodistas Deportivos en 1989. Socio vitalicio del Círculo de Periodistas Deportivos. Experiencia en radio, revistas y periódicos. Práctica de prensa en Copa América 1997. Conferencias Scaloni 2022/23 Cronista de los Premios Olimpia anualmente

Publicado en SIMBOLOS PATRIOS