Argentina está en Octavos y justificó plenamente su pase de ronda con un triunfo inobjetable, buscado desde el primer minuto. Tuvo convicción, asumió el protagonismo que correspondía y mostró nuevamente el fútbol que supimos aplaudir en Copa América y Eliminatorias.
Polonia fue una sombra en el primer tiempo y un fantasma en el segundo tiempo, aunque en realidad, ellos estaban asustados de quedar afuera de los Octavos por diferencia de gol. Me pareció poco «loable» que decidieran defenderse aún más, en lugar de buscar un gol para volver a tener mejor diferencia, «equipo chico» qué le dicen, no? O equipo con pocas aspiraciones.
Argentina tuvo fluidez, pases cortos, cambios de ritmo, arranque de jugadas por un sector con culminaciones en el otro, tipo ataque de rugby, como digo yo. Se evidenció especialmente en el primer tiempo cómo Acuña recibió varias veces muy libre en las cercanías del área rival.
Muy buen nivel de varios jugadores, ahí se evidencia que fueron UN EQUIPO. Me cuesta encontrar una figura: Mac Allister, Alvarez, Molina, Otamendi, Romero, Fernández, el mismo Messi y De Paul, especialmente en el ST, Acuña, en fin, casi todos en gran nivel.
Ahora llega Australia. Es otra final. Desde que perdió con Arabia Saudita, Argentina agotó la única «bola negra» de perder un partido en un Mundial, solamente uno podés perder, si querés seguir compitiendo. Hay que ganar todo y el primer paso es encarar cada encuentro como lo hizo frente a Polonia.
Habrá que ver el estado físico, Di María por ejemplo, la carga de minutos, la posibilidad del generativo. Lo bueno es que Scaloni no necesita un equipo de memoria porque los que están entrando, al inicio especialmente, juegan igual o mejor que los que salieron.
Argentina vuelve a ilusionarnos, ayer dio una muestra cabal de que tiene armas y herramientas para aspirar a seguir compitiendo en pos de ser uno de los mejores del Mundial de Qatar. Pero no nos apuremos, vayamos Scaloni x Scaloni… la escalera a la final es larga.